Left senses {Chantel&Ade}

¿Y que se supone que debía hacer yo? Ah sí; buscar una botella de JB que traía escondida en el fondo del armario de mi cuarto asignado. Lancé la ropa de mi compañera por los aires, despreocupada sin pensar siquiera lo que me iba a decir por aquel desorden… hasta que por fin la encontré; una sonrisa se curvó en mis labios y la agarré girando el tapón y dándole un largo trago; dejando escapar un ‘brrr’ de mis labios y cerrar los ojos por el ardor que estaba pasando por mi garganta en aquellos momentos. Amaba el alcohol. Oh mira, un sentimiento; en el examen de Artes debería haber dibujado una botella de JB. No pude evitar curvar una sonrisa ante aquel pensamiento, recordando la reprimenda que me había llevado por parte de la maestra ya que no había realizado el examen. Suspiré cerrando las puertas; las cuales quedaron medio abiertas por culpa de mangas de camisetas medio caídas y esquivé la ropa tirada por los suelos para salir de la habitación; con botella en mano, por supuesto.

Paseé por los pasillos; los cuales estaban repletos de gente que conocía de vista; solo eso, de vista. Nadie era lo suficientemente valiente como para atreverse a conocerme; y aquello producía en mí una pequeña satisfacción, me tenían miedo. Sin saber ni cómo ni por qué; mis pies terminaron en las canchas de baloncesto, y mi culo postrado en uno de los bancos que habían rodeando la cancha. Pude observar como un chico botaba un balón y lanzaba a canasta; encestándola. Alcé las cejas y le di otro trago a la botella. Novato.

He llegado hace dos días, no por decisión propia claro que no, mi familia se cansa se mi o mejor dicha mi vida mi rutina, pero si jamás los veo los negocios pueden más que yo, claro claro con que pagan mis gustos, mis diversiones eso decía mi madre y como para excusarse me metió a la universidad más cara como si me interesara, lo único que me interesaba era el curso que llevaba amaba la biología pero nadie lo sabía ni mis padres reconocían que era buena en ello, mi vida está llena de aventuras conozco a distintas personas digamos que de distinta clase social, aunque viva en la Elite de Manhattan eso no interesa aprendí a tratar con todos y acá mire a todos lados en mi habitación la que aun no decoraba , espero haya diversión, resople y Salí de ella

-“necesito distracción, veré si hay algo interesante por acá”, camine por los pasillos vi una canchas me llamaron mucho la atención, todos se asombraban cuando me veían jugar football decían que me veía muy delicada para jugarlo pero a mí me divertía jugarlo así que decidí entrar no le iba al básquet pero vería que me salía, pude ver a un joven alto, atlético encestar a la primera guau eso es saber lo que se hace, aplaudí y me acerque – buen tiro – le dije para empezar una conversación a la vez que mi mirada se iba hacia el de una chica que bebia algo de una botella

[size=12][size=9]Lo único que pedía a gritos era machos con el lenguaje más amplio que puede haber tenido cerca a mí, claro que mis noches fuera de casa jamás fueron en cualquier sitio siempre estuve rodeada de gente educada y culta sobre todo las personas mayores de las que sacaba buen provecho y mira con lo que me vengo a encontrar, el atlético aparte de verse bien eso no se le niega a nadie tenía el ego sobre los cielos, como si eso me causara asombro, mire a la chica sentada en la banqueta por un segundo y me imagine con ella claro yo solo con un cigarrillo en la mano.
-Amabilidad mía, no lo tomes muy enserio, pero se reconocer cuando las personas hacen algo bien – conteste como que me daba lo mismo el tono que use conmigo y era asi trataba a todos por igual - “cada quien tiene un poco de lo que da” –pensé

Mucho gusto Hazel, Ade Vander Bit – le dije sonriendo y extendiendo mi mano, si había algo que no se me quitaría nunca era lo educada, note su acento Ingles - de dónde vienes? Hazel - le pregunte al mismo tiempo que lo miraba esperando una respuesta

Me crucé de piernas, observando detenidamente como el chico lanzaba otras veces hacia la canasta encestando igualmente. No pude evitar curvar una sonrisa mientras volvía a llevar mi botella a mis labios; hasta que se percató de mi presencia. Le miré fijamente, sabiendo que iba a intentar acercarse; por lo menos para entablar una simple conversación… Y eso comenzó a hacer. Empezó a caminar hacia mi dirección, pero de repente apareció otra chica; la cual hizo que toda la atención del chico cayera sobre ella; no sin antes mirarme de soslayo una sola vez. Alagó su tiro, cosa que yo nunca habría hecho y más después de escuchar su respuesta. No pude evitar soltar una carcajada sorda después del tono despectivo que había soltado hacia la chica; para luego escuchar perfectamente su nombre sin mostrar ninguna muestra de interés.

Hàzel; un nombre que no había escuchado en mi vida, pero al parecer era inglés por su perfecto acento. Luego le presté más atención a la chica; analizándola poco a poco, centímetro a centímetro. Otra novata, pues no me sonaba ni uno de sus tantos pelos. Entrecerré los ojos escuchando lo que le había contestado con la misma indiferencia que él; una conversación interesante, si señor. Suspiré volviendo a dar un trago a la botella y vi como la chica me miraba. Tenía pinta de buscar a cualquiera que le diera un poco de placer, y por eso no pude evitar arrugar la nariz cuando volteó a verme; demostrando así mi desagrado por su persona. Escuché su nombre y suspiré. ¿Ade? Provendría de Addela; porque ni no, no se me ocurría otra cosa.